Ayer escribí el artículo de 32k o 16k+16k. Y para comprobar que lo que decía mi amigo Pedro era verdad. Nada mejor que vivirlo en mis propias carnes. Así que me puse mi ropa de correr y me bajé a al calle.

El circuito era uno de 16km que suelo hacer. Es circular y toca calles, huerta, playa y avenidas. Se hace bastante ameno, pero claro, si se hace una sola vez. En este caso serian 2 y para que la mente no me jugara una mala pasada, cosa que cuando uno está cansado suele suceder. Decidí hacer la primera vuelta al contrario de las agujas del reloj (cosa que nunca había hecho), y la siguiente en sentido normal. De esta manera pese a ser el mismo recorrido, sería como una tirada en todo momento novedosa.




A las 18:21 me puse en marcha. Con muchas ganas de hacer mi súper tirada de 32k. Mi propósito era de no bajar de 5’30’’/km y así lo hice. Sabiendo que se trata de hacer muchos kilómetros, no tiene sentido el empezar muy fuerte, para luego quedarse sin fuerzas y tener que terminar la tirada a 0 de energía.



Los primeros km discurrieron por la Ronda Norte y pronto, sobre el 4 ya estaba rodando por la avenida dels trarongers, frente a la Universidad Politécnica de Valencia. Mantenía el ritmo controlado, de vez en cuando miraba el GPS y todo correcto.

Un poco más adelante tenía el primer punto de avituallamiento que no es más que una fuente que hay en el paseo marítimo de la Malvarrosa. Esto era entrado el km 5, notaba como mis piernas pedían más, pero claro, a esa distancia es como quien dice, cuando las piernas se despiertan y ya están al 100%. Sigo entre 5’30’’ y 5’45’’/km.

Algo mas adelante entro en el barranco del Carraixet, una senda verde que de ella aprovecho unos 2 km. Cosas buenas: se escuchan los patos, no hay coches y es muy tranquila. Cosas malas: que no se ve un carajo, está oscuro como la boca de un lobo y hace una humedad que te quedas tieso. Pero en el fondo me encanta xD

Salgo de barranco y entro en Alboraya, cojo un carril bici que va por la huerta y se une a la ronda Norte. La cual me llevará hasta el punto de partida.

Ya estoy en el punto de partida y mis piernas sin estar exhaustas, notan ya los 16 km. Pienso que tengo fuerzas para volver a repetir el recorrido, ahora a favor de las agujas del reloj. Doy media vuelta y sin saber lo que me esperaba, comienzo lo que iban a ser unos de los peores entrenamientos de mi vida.

Sin darme mucha cuenta, pues llegado este punto voy como en piloto automático. Me planto de nuevo en el carril bici hasta Alboraya. Esto es en el km 20.

La respiración perfecta, pero las piernas, uff ¡¡ Las piernas empiezan a pesar. Pienso que 12 kilómetros mas y fuera. Se acabo el sufrimiento. El ritmo es lento y eso es bueno y malo, porque los ritmos lentos son machacantes. Mucha gente me ha dicho que no son capaces de correr una media Maratón lenta. Se les cargan los gemelos y tienen que parar a estirar. Sin embargo si la corren rápida, no tienen problemas de engarrotamientos.

Sigo y vuelvo a la senda verde del barranco de Carraixet. Si antes hacia humedad, ahora hace “requetehumedad”. Siento el pecho frío y el cuello también. Me subo el cortavientos al máximo e intento proteger esa zona.

Una de las cosas que me doy cuenta que he fallado, ha sido con el agua. Pues desde que salí, solo he bebido un par de tragos en el km 5,5. Y la verdad es que tengo bastante sed. Por suerte ya vuelvo al paseo marítimo de la Malvarrosa y ahí me espera mi ansiada fuente. Paro y bebo con calma. No quiero tener problemas con el estómago a estas alturas. Con los que tengo ya me conformo.

Termino de beber y siento las piernas como dos palos. Están rígidas, rígidas. No tengo mas ganas de seguir corriendo, pero a 7 km para el final no pueda tirar la toalla. Me pongo en marcha y como pirata con pata de palo, doy las primeras zancadas, hasta que normalizo el trote. Que de los 5’45’’/km del principio, han pasado a unos 6’10’’.

Estoy hecho polvo. Siento que corro por inercia y las dudas me asaltan. No se si voy a ser capaz de llegar. A parte de cansado, bueno no, a parte de extremadamente cansado, me encuentro mal.




Y en el kilómetro 26,890, con 2h37’54’’ y una media de 5'52''/km en las piernas. Pasa lo que tenia que pasar. Al parar en un semáforo. Justo cuando voy a empezar la avenida dels tarongers hasta la ronda norte. Noto que no puedo más. Ya no son solo las piernas, tengo la cara fría, pero no por el frío de la calle, si no que siento escalofríos, mareo y ganas de vomitar.

Si, he tenido una pájara. Y contra eso no hay nada que hacer. Cuando el cuerpo no va, no va. Y el mío ha dicho BASTA ¡¡¡

Lo malo es que con el malestar y a 6 km de casa, la cosa se pone algo difícil. No puedo quedarme ahí y tampoco me apetece dar un paso más. Pero la idea de llegar a casa es más fuerte y empiezo a andar.

Más o menos 1h después llego. Completando los 32km. Los primeros 28 corriendo y el resto andando. Para mi es un fracaso, pero supongo que he salvado el honor al terminar el entrenamiento íntegramente, aunque sea andando al final.

Conclusión

Uno de los peores entrenamientos de mi vida y eso que los he tenido bastante malos. Pero este está en el TOP 5 seguro.

He de decir a mi favor que el día anterior me casqué 16km. Y acarreo una lesión de periostitis. Que si bien está estancada, no deja de ser molesto el correr con ella. Por suerte no ha empeorado.

Referente al tema que si 32k = 16k+16k, doy fe que no. Y el que no se lo crea, que haga la prueba. Se lo pasará genial, juas juas juas.

Por último decir que 32k no van a poder conmigo y menos cuando tengo que correr en 17 días 42km. Así que si el tiempo me lo permite, este sábado voy a por ellos otra vez. VAMOOOS ¡¡¡

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